Brevería 1604
Avanzo lenta, alternativamente,
por la doble avenida
de tus muslos abiertos. Inminente
se anuncia mi llegada. Me convida
tu propia invitación, y estremecida,
qué largo te parece
el momento tan breve de la espera.
Tu ruta se humedece,
mi ritmo se acelera,
tú, mi enramada, yo, tu enredadera.
1469 - Soterrado manantial
Cabeza entre ambos muslos, convergencia
de dos ríos en una sola fuente;
sedienta está la boca, y en la mente
los conceptos olvidan su elocuencia.
Quien ha llegado aquí sin resistencia
por sendero de acción irreverente,
ni se rinde al pudor, ni se arrepiente,
desplazando el ardor a la inocencia.
Siempre en voracidad, y con la audacia
de quien invita, acepta y no se sacia
con cada nuevo ruego, nueva oferta.
Manantial soterrado, reventando
espumoso en los labios, conjurando
dormida rosa que febril despierta.
Cantabria, 16 de mayo de 2006