Brevería 1807
Con sueños de cristal y luz me sueñas,
tan claros y tan frágiles, tan bellos;
y yo te sueño en brisas y destellos,
a pleno sol y en sombras hogareñas.
Hay en la ensoñación más que utopía,
más que trivialidad, más que visiones,
los sueños son rosal de obligaciones
que deben germinar día tras día.
Te sueñan
Te sueñan, sin haberte conocido,
se te declaran sin llegar a hablarte,
y te codician: Todos los alumnos
de academias y de universidades,
los obreros de todos los talleres,
los tenderos de todos los bazares;
te llevan todos en su pensamiento,
y es, sin saberlo, cada cual tu amante.
Aún no saben que existes,
ni el número ni el nombre de la calle
donde se alza tu casa,
toda de piedra, oculta entre los sauces,
con el balcón al Este,
y sus geranios perfumando el aire.
Mides uno setenta y dos, y pesas
cincuenta y siete kilos; fluctuante
desciende tu cabello hasta los hombros,
y son tus senos frutas tropicales,
firmes, maduras, tan apetecibles…,
pero aunque lo imaginan, no lo saben.
Cada día te esperan,
y al cerrarse la tarde,
dejan la puerta abierta,
con la absurda esperanza de que pases
y sin llamar al timbre,
te adentres en su espacio, y les abraces.
Tú no sospechas esas manos tibias,
invisibles, tendidas a tu carne;
tal vez, sin conocerlas, las añoras,
pero tan incorpóreas, tan distantes…
Eres sueño de muchos.
Yo también te soñé, en los olivares,
en las playas desiertas,
sobre la alfombra al fuego crepitante,
bajo la sombra densa de los olmos,
casi casi a mi alcance.
Y tú, tan circunspecta, tan remota,
nunca lo sospechaste.
Hasta que un día, cuantos te soñaron,
cuantos agonizaban de esperarte,
los que temblaban por tu piel desnuda,
todo el espeso enjambre
de hombres enamorados
que dormían contigo, itinerantes
cada noche en tu cuerpo,
sin tú advertirlo, lúbricos, unánimes,
se adentraron en mí. Su fuerza cósmica
me arrastró en derrotero irrevocable.
Te busqué, te encontré, me recibiste,
y ni pude ni quise retirarme.
Tú ya no tienes otra opción; detento
la fibra de millones, y su arranque.
Los Angeles, 3 de diciembre de 2008