Brevería 981
Un alto en el camino, y una oferta
para el desconocido viajero;
tal soy, en alma y cuerpo descubierta,
como flor sin maceta o jardinero;
si pasas, me verás libre, despierta;
sino tú, otro será; yo, en tanto, espero
la mano inquieta, la palabra tersa,
y el alma ingenua, y a la vez perversa.
2015 - Férvido brindis
Me invitaba a su lecho. Lo decía
con la seguridad de quien libera
vedadas intenciones, y aligera
su fardo de tabúes. Me bebía
los ojos al hablar, su anatomía
férvido brindis hacia mí, a la espera
de mi respuesta, como si temiera
esquivez o repudio. Anochecía.
La estancia a media luz; el limonero
fisgando en la ventana, y un bolero
cantando en la consola, insinuante.
No dije nada. Rodeé su talle,
acercándola más, y en tal detalle
descifró mi propósito de amante.
Los Angeles, 15 de enero de 2009